Cheesecake con Lady Fingers y mermelada de pomelo (Reto Alfabeto Dulce)

Cheesecake lady fingers y pomelo_Saboreando Ideas

Ya ha llegado otra vez el reto Alfabeto dulce. Fue hace un mes cuando publiqué mi primera receta para este reto. Me gustó tanto la iniciativa que me he animado a seguir en el reto. Es muy gratificante ver que gusta aquello que comparto, así que mil gracias a quienes llegaron hasta mi blog para dar con la trenza de spéculoos, a l@s que me dejaron un comentario y a l@s que se quedaron en este pequeño rincón de la blogosfera.
Volviendo al tema de la entrada, mi propuesta es un delicioso Cheesecake con Lady Fingers y mermelada de pomelo.
Me explico mejor. Este cheesecake está hecho con una base de bizcochos Lady Fingers y mermelada casera de pomelo, pues en la nueva temporada del reto habrá dos ingredientes protagonistas y éstos han sido los elegidos. ¡Ah, y no es necesario usar el horno!

En seguida os dejo la receta, pero antes quería comentar que la mermelada de pomelo me salió un pelín líquida a pesar de haber buscado información de cómo hacerla. Así que si alguna alma caritativa sabe cómo conseguirla más espesa le agradecería un montón que compartiera su truco en los comentarios. Al fin y al cabo, uno de los fines de los blogs de cocina es aprender l@s un@s de l@s otr@s ☺

Ingredientes

Para la base
● 230g de bizcochos Lady Fingers
● 135g de mantequilla

Para la mermelada
● 2 pomelos
● 455g de azúcar

Para hacer mermelada se suele usar la mitad del peso de la fruta que quieras usar. En este caso utilicé 3/4 partes de azúcar del peso de los pomelos, una vez pelados. Es decir, éstos pesaban 576g y de azúcar al final puse un poco más de 3/4 para evitar la acidez de ésta fruta.

Para el relleno
● 600g de queso de untar
● 220g de azúcar
● 1 cucharadita de extracto de vainilla

Elaboración

Mermelada casera de pomelo

Empezamos con ésta porqué es un proceso más lento y de mientras que se está haciendo podemos ir preparando el cheesecake. Pelamos los pomelos retirando toda la "camisa" blanca que lleva, es decir, aquello blanco que se nos queda al quitarle la piel, igual que nos pasa con las naranjas. Es necesario pelar todo muy bien porque sino nos amargará la mermelada (tengo que avisaros de que esta fruta tiene un sabor peculiar y a muchos les puede parecer muy amarga).

Troceamos el pomelo y lo ponemos en la olla en la que vayamos a realizar la mermelada. Vertemos el azúcar, media ramita de canela, un chorrito de limón y calentamos a fuego bajo. Lo dejaremos a la misma temperatura e iremos removiendo de tanto en tanto hasta lograr que coja la textura de mermelada deseada.

Como yo quería mermelada para la tarta de queso no hice gran cantidad, lo justo de un tarro. En caso de que quisierais hacerla en mayor cantidad y la quisierais consumir meses más tarde tendríais que guardarla caliente en botes de cristal esterilizados. Así os duraría en buen estado.

Cheesecake

Trituramos los bizcochos con ayuda de una picadora. Si no tenéis podéis ponerlos dentro de una bolsa de plástico (¡limpia!) y con ayuda de un rodillo los aplastamos. Después lo vertemos en un bol y añadimos la mantequilla derretida. Mezclamos todo bien y los usaremos para hacer la base y los laterales. El molde que yo usé es uno de 22 cm.

En un bol batiremos el queso (estará a temperatura ambiente), el azúcar y la vainilla con ayuda de una batidora de varillas. Una vez listo añadiremos la nata y batiremos como mínimo 2 minutos o bien hasta que se espese la mezcla. Tenemos que vigilar de no pasarnos batiendo porqué sino la nata se cortará.

Pasamos la mezcla al molde con cuidado de no estropear la base y los laterales. Dejamos enfriar durante unas horas antes de servir. Personalmente, os aconsejo que lo dejéis toda la noche ya que así estará más sabroso. Antes de servirlo desmoldamos y cubrimos por encima con la mermelada de pomelo.

¿Fácil y rico verdad? A mí me encanta saborear este tipo de ideas. Para ésta me he inspirado en uno de los libros de Alma Obregón.

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También quería aprovechar esta entrada para explicaros que con la primera foto, la del cheesecake, participo en el reto Fotografía Culinaria de Cocinando Sabores. En esta ocasión, la foto tenía que ser tomada en ángulo picado. He recurrido a una composición simple para resaltar el cheesecake el cual es el protagonista de ésta y he jugado con colores complementarios.

Espero que la disfrutéis y la compartáis para que llegue a más gente :)

¡Un beso muy fuerte y a saborear ideas!